miércoles, 26 de enero de 2022

Esta noche ha vuelto a nacer el invierno, el infierno...
Yo pensé queas noches de dormir llorando habían quedado atrás, y no..
El frío cala hasta lo más profundo, sigo pensando que deberíamos ser dos contra el problema, pero el viento dice que el problema soy yo, por las cosas que no he hecho y por las que sí. 
Me quedo inmóvil porque un rayo no cae dos veces en el mismo sitio, pero creo que me ha confundido con un pararrayos. 
No puedo encontrar la forma de esquivar el desdén y el recelo. Peor aún, no puedo contenerlos y me empapan otra vez en el llanto que afuera llueve e intento mantener encendida la idea de que ya pasará. 
Pero el pronóstico avisa tormentas y un cielo al que imploro benevolencia y paz. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario

 A veces mi casa parece una sombra, un hueco, hay espacios que se van sintiendo fríos, marchitos. Hay veces que no quiero volver. Que siento...