Besar, besarte, besarnos...
Tu voz viajera resonaba en mis oídos,
y su eco llenaba mis vacíos.
Voz fuerte, Voz grave.
Cada palabra que brotaba de tu boca,
se quedaba colgada en mi memoria.
Mis ojos.
Mi mirada buscaba tus palabras,
veía tus ojos y luego tu boca,
gran espectáculo
ver tus labios dar discursos sobre cosas que no escucho.
Tu boca, que jamás pensé tocar
de pronto comenzó a hablarme,
a dirigir sus frutos a mi.
Y entonces tus labios
¡Oh labios ansiosos, labios fuertes,
labios dulces, dulces labios!
Reposo de mis ojos y suspiros.
Encontraron mi sedienta boca.
¡Qué dicha experimentar tal placer!
tus labios rozaron los míos,
suavemente, deseosamente,
inevitable y estremecedoramente,
y luego de un suspiro,
tus labios se volvieron míos,
mis labios perdieron la cordura
y siguieron soñando tus labios,
y se declaran adictos a tus besos.
Tu voz viajera resonaba en mis oídos,
y su eco llenaba mis vacíos.
Voz fuerte, Voz grave.
Cada palabra que brotaba de tu boca,
se quedaba colgada en mi memoria.
Mis ojos.
Mi mirada buscaba tus palabras,
veía tus ojos y luego tu boca,
gran espectáculo
ver tus labios dar discursos sobre cosas que no escucho.
Tu boca, que jamás pensé tocar
de pronto comenzó a hablarme,
a dirigir sus frutos a mi.
Y entonces tus labios
¡Oh labios ansiosos, labios fuertes,
labios dulces, dulces labios!
Reposo de mis ojos y suspiros.
Encontraron mi sedienta boca.
¡Qué dicha experimentar tal placer!
tus labios rozaron los míos,
suavemente, deseosamente,
inevitable y estremecedoramente,
y luego de un suspiro,
tus labios se volvieron míos,
mis labios perdieron la cordura
y siguieron soñando tus labios,
y se declaran adictos a tus besos.